El año pasado, recién empezaba el confinamiento en Calgary, me preguntaba qué podía hacer con el tiempo disponible en mis manos. Un pensamiento fugaz me hizo caer en cuenta de algo terrible: “Nunca he visto una película de María Félix.”
Pues sí. Me da pena aceptarlo. Esa era mi realidad hasta ese momento y tenía que hacer algo al respecto. ¿Cómo era posible que no había visto actuar a La Doña? La mujer de carácter irrepetible. Sí, sí, la María de todas las Marías. La misma María que le dio un “no” rotundo a Hollywood porque sólo le ofrecían hacerla de campesina en la pantalla grande.
María Félix, la que hizo pacto con el diablo (o con la vida) para ser bonita. Me dijo mi mamá que cuando la enterraron, su cuerpo esta acomodado de tal forma que hacía una posición satánica. Por eso no había que hacerle mucho caso a su legado de películas y frases célebres.
Ahora quiero hacerle mi propio homenaje. Ella es la actriz más importante de la época de oro del cine mexicano y, aún muerta, sigue dando de qué hablar. Espero que mi mamá no esté leyendo esta entrada de blog.
Gracias a YouTube, encontré varias películas completas que podía ver en ese mismo día si yo quería. No sólo eso. También podía ver entrevistas, clips que sus fans han publicado, en fin, una buena colección de material audiovisual que capturó la personalidad de La Doña.
Después de ver este monólogo majestuoso, decidí que la primera película que quería ver era El Rapto. Me intrigó la manera en la que María interpretaría su personaje. Necesitaba saber qué más pasaba en la historia y cómo ella resultaría triunfante.
Doña María Félix es referente en cualquier ámbito de la vida, no sólo en lo artístico. Cuando escucho lo que pensaba sobre la política, los hombres y hasta la auto-estima, me lleno de nuevas ideas para reinventarme.
Si estoy baja de ánimos o si la cotidianidad pesa demasiado, me pregunto “¿qué haría María Félix?” y todo se compone. O leo esta frase y me propongo hacer un pacto con la vida, donde nada ni nadie me haga desistir.
Nunca he querido a nadie como me quiero a mí misma. Entonces, nadie ha podido hacerme sufrir.
María félix
En el 2021 se cumplirán 19 años desde que partió de este mundo. Después de todo este tiempo, nuevas generaciones siguen conociéndola. Si María estuviera viva en estos tiempos, ¿qué diría sobre la violencia de género y la sociedad machista que aún predomina en México? Seguramente estaría muy activa en foros de discusión.
O quizá no. Más bien nos estaría recordando que ella no es ejemplo de nada pero seguiría firme en que la presidencia debería ocuparla una mujer.
Ay, María. Nos hacieron falta más lecciones de vida, pero las que nos dejaste son entrañables.
Foto de encabezado tomada de Capital México.